Cómo enseñar a tu perro a caminar a tu lado

Puedes hacer que el entrenamiento de obediencia sea divertido para el perro, y para ti también, haciendo un juego. Esto hace que tanto tu perro como tú, como entrenador, estéis más dispuestos y motivados a darlo todo.

Incorpora un período de juego al comienzo y al final de cada sesión de entrenamiento para asegurarte que la sesión termina de forma positiva.

Enseñar a tu perro a caminar a tu lado es el más básico de todos los mandatos de obediencia. En general, es el primer comportamiento de obediencia que se le enseña a un perro, y es fácil de enseñar usando el entrenamiento de recompensa.

Comienza el entrenamiento poniéndole a tu perro un buen collar de entrenamiento y una correa. Asegúrate que el collar sea fuerte y se ajuste al perro correctamente. Si no sabes cómo ajustar el collar, pregúntale a un adiestrador de perros o al dueño de la tienda de mascotas cuando compres tu equipo de entrenamiento. En esta entrada tienes más información sobre cómo acostumbrar a tu perro a llevar el collar y la correa.

Cuando comiences a caminar con el perro, ten en cuenta la posición del perro en relación con la tuya. Si el perro comienza a adelantarse, tira suavemente de la correa. Esto enganchará el collar y proporcionará al perro una suave indicación de que debe disminuir la velocidad.

Es posible que tengas que aplicar más presión al principio hasta que tu perro aprenda a aceptar la disciplina.

Si el perro se queda atrás, disminuye la velocidad y anima al perro a avanzar. Usa un señuelo o su juguete favorito para enseñarle a caminar a tu lado. Si mantienes el cebo en la posición donde te gustaría que estuviera el perro, aprenderá rápidamente a caminar en la posición correcta.

Refuerzo Positivo

Siempre hazle a tu perro muchos elogios, dale golosinas, juguetes y otras recompensas cuando haga lo que se espera. Los perros aprenden mejor cuando el comportamiento deseado es recompensado de una manera positiva.

Refuerzo positivo significa que cuando un perro hace lo que el entrenador quiere, el perro recibe una recompensa. Esto puede ser una palmadita en la cabeza o una golosina, o juguete de algún tipo. Si el perro muestra el más mínimo intento de complacerte, especialmente al comienzo del entrenamiento, debes recompensarlo con un refuerzo positivo.

Es mucho menos efectivo intentar entrenar a un perro a través de reprimendas y castigos. Los perros se desaniman y se confunden con demasiado castigo.

Es posible que tengas que reprender al perro a veces para corregir un comportamiento potencialmente peligroso. Por ejemplo, perseguir coches o morder debe ser castigado, pero las amonestaciones deben ser directas, cortas y directamente relacionadas con el mal comportamiento. Una vez que el peligro inmediato ha terminado, la capacitación debe continuar, según el método de recompensa como antes.

Los perros deben aprender a asociar las recompensas con los buenos comportamientos y las reprimendas con los comportamientos indeseables. Es difícil cambiar cualquier asociación negativa una vez que se han afianzado. En primer lugar, es más fácil entrenar correctamente al perro que intentar entrenarlo nuevamente más tarde. Debes enseñarle a tu perro a asociar comportamientos como venir cuando se te llama, hacer tacones y estar al mando, con los momentos felices y divertidos que compartiste durante el entrenamiento.